Este artículo va dirigido a los hombres y mujeres que en su afán de ser los mejores en su área laboral, por una u otra circunstancia restan tiempo de calidad a su entorno familiar, hasta llegar a la lamentable separación de pareja, abandono de los hijos, círculo de amistades y desconocimiento de nosotros mismos.

Entendamos que absolutamente nada puede estar por encima de nuestro bienestar físico-mental y familiar, puesto que el trabajo es una herramienta que sirve de sustento económico, más no es el único medio de sobrevivencia (puedes emprender tu propio negocio, buscar otro empleo o invertir en proyectos que consideres rentables).

Valores familiares y por qué mantener un balance con el trabajo

Por otra parte, y con preocupación podemos decir, que aún hay personas que en sus mentes se repiten una y otra vez como mecanismo de justificación que trabajan incansablemente para pagar los gastos y que hacen lo correcto; pero reflexiona por un momento, ¿Alcanza el sueldo que recibes para compensar la pérdida de los mejores momentos de tus hijos?, ¿Quedarte solo?, ¿Vale la pena trabajar horas extras y sentir que se abre un abismo en tu relación de pareja?

La respuesta a esta problemática no es compleja, ya que los empleadores deben tomar conciencia del valor de la familia como base fundamental de la sociedad y permitirle a sus trabajadores el goce de un buen descanso y horas laborales ajustadas a un período de 8 horas diarias.

Igualmente, incentivar a su personal a ser proactivo, a mejorar las condiciones en el ambiente laboral, a fomentar el respeto y la oportunidad de crecimiento profesional, son factores que al final contribuyen a disminuir el ausentismo en el trabajo y aumentar la producción. Es una relación de ganar y ganar para ambas partes.

Sin embargo, todo esto se lee muy bien y en pleno siglo XXI se supone que no deberían existir jefes “explotadores”, es por ello que aquí hago una pausa para resaltar lo fundamental del apoyo familiar para sobrellevar cualquier trabajo o para esos días en que sientas la necesidad de una palabra de aliento.

Los valores familiares trascienden y alimentan el alma

En esta ocasión, hablo sobre los valores familiares porque es una de las primeras enseñanzas que adquirimos en nuestros primeros años de vida; una familia unida podrá ser de recursos económicos limitados pero tienen algo que ninguna suma de dinero compra y es la felicidad.

Una persona que se ama a sí misma y a las demás, sabe respetar las diferentes ideologías y  reconoce lo valioso del ser humano. De igual forma, cuando tenemos principios y valores no le hacemos daño al prójimo, ni nos aprovechamos de sus necesidades.

Digo que los valores familiares trascienden y llenan el alma porque son el motor que impulsa a la sociedad y nos llenan de paz interior. Cabe destacar que estos valores no caducan, no tienen precio y ayudan a hacer un mundo mejor.

Consejos para conciliar la familiar con el trabajo

• Los problemas laborales se quedan al salir de la oficina. No cargues con ellos.
• Trabaja ocho horas diarias y eventualmente unas horas extras si la ocasión lo amerita.
• Dedica 10 minutos para hablar con tu pareja o amistades sobres los problemas laborales.
• Desecha lo malo, saca lo positivo, encuentra una solución y cierra el capítulo.
• Un abrazo en familia alegra al corazón.
• Planifica tu tiempo.
• Al menos que seas médico después del trabajo deja a un lado tu teléfono y ocúpate de prestarle atención a los tuyos.
• Cuando veas a un integrante de tu familia estresado, dale su espacio y espera que se calme para poder conversar.
• El trabajo también se respeta, cumple con tus funciones y hazle saber a tu familia que te llamen en casos de emergencia.