RSE: La Responsabilidad Social empresarial es un deber para todo empresario
El mundo viene dando tumbos desde mucho antes de la pandemia; solo que esta ha exacerbado sus anomalías. Precisamente, pienso que es en las actuales circunstancias que como sujetos jurídicos nos debemos más que nunca a causas solidarias, siendo empresas socialmente responsables.
Que la RSE sea un llamado al que nos debamos como empresarios, no quiere decir que tengamos que ser Atlas -aquella figura mitológica sobre la que recae el peso del mundo. Pues, todo individuo debe ser socialmente responsable. No obstante, soy de los que ve como un deber, el compromiso social para hacer de este mundo un lugar mejor; ética que he sostenido desde que he sido gerente de empresa (de esto hace ya varias décadas).
Por esto, en un mundo infestado, golpeado económica y socialmente, tengo la firme creencia de que las empresas vienen a jugar un papel fundamental para el restablecimiento de la normalidad. Sé que no es fácil, pero esto es un esfuerzo mancomunado, que requiere de la responsabilidad social de las personas y la responsabilidad social corporativa.
RSE en el 2021
Ahora, en este año que comienza, nuestro gran aporte al bienestar social debe prestar una particular atención a una serie de temas que tienen que ver con lo social pero también lo económico, e incluso lo ambiental.
Ya vamos viendo mejor la responsabilidad que recae sobre nuestros hombros, como empresarios comprometidos con el bienestar social de nuestra gente.
En lo social
Como decía al principio, hemos heredado un mundo con males puntuales que se estaban subsanando, hasta la llegada de la pandemia. Me refiero a la pauperización de nuestro prójimo en lo económico.
Si somos éticamente responsables como sujetos, veremos que también lo podemos ser empresarialmente. Una cosa no excluye a la otra. Me gusta en este sentido alentar a otros empresarios a practicar métodos eficaces que contribuyan al bienestar social.
Siempre que tengo la oportunidad procuro hablar en mi gremio de empresarios de las fundaciones y organizaciones sociales comprometidas con los más necesitados y como con estos gestos ganamos todos como sociedad.
Por ejemplo, en mi fundación, la Fundación Chito y Nena Kafie nos centramos en trabajar en hacer la educación más inclusiva y de calidad; en asistir a hospitales en temas de salud y en brindar un apoyo más directo a diferentes comunidades. Y no hay cosa parecida a la satisfacción que te da el deber cumplido, en ayudar a los otros, en saber que estás creado un mundo más civilizado para la sana convivencia.
En lo económico
Siempre lo he tenido presente, nuestros empleados son nuestro mayor bien. Y este año que ha terminado, ha dejado secuelas en nuestros empleados. Debemos estar a la altura de nuestra responsabilidad social corporativa para con ellos.
¿Cómo? Brindando mejores condiciones laborales, en la medida de nuestras posibilidades. Al final del día, tanto empleados como patronos están remando en la misma dirección: levantar los niveles de productividad de la empresa. Todos sumamos…
Con el medioambiente
No hablaría de ello, si no fuese por los estudios que he revisado sobre, cómo la pandemia del covid-19 incidió de manera negativa en el medioambiente. Ya que como empresarios tenemos una visión integral del mundo, sé que podemos comprometernos aun más en este tema. Y que podemos trabajar -por ejemplo- de la mano con organizaciones sociales más duchas en el tema.
Todos estos son temas que nos interpelan de forma singular en este comienzo de año, porque, se acepte o no, quizás hoy más que nunca la sociedad hondureña necesita de empresas socialmente responsables, comprometidas con el bienestar de nuestra gente.
- Posted by Eduardo Kafie
- On 1 enero, 2021
Leave Reply